Según la mitología grecorromana Perséfone (o Proserpina) era hija de Zeus y Deméter. A pesar de su procedencia divina y a diferencia de sus hermanos, Perséfone no habitaba en el Olimpo sino en la tierra, con los humanos. La diosa, al ser hija de Deméter, divinidad de la agricultura, se interesó en las plantas dedicándose a plantar semillas y a cultivar.
Sin embargo, un día mientras Perséfone se encontraba recogiendo flores, el suelo se abrió y emergió Hades, señor del inframundo, raptándola y llevándosela a sus dominios para erigirla Reina del Inframundo. Deméter buscó alterada a Perséfone mientras que la tierra comenzó a palidecer. Poco después Zeus, al ver lo que estaba sucediendo envió a Hermes, el mensajero de los dioses, a negociar con Hades para que devolviese a su hija de nuevo a la tierra. Se trataba de una negociación bastante complicada pues Hades era físicamente poco agraciado y en el inframundo no encontraba ninguna pretendiente… lo que hacía más difícil que lo separasen de la diosa que había raptado. Hermes consiguió hacer un trato con Hades que mantenía que si Perséfone en el viaje de vuelta no probaba bocado podía irse sin más. Hades engañó a Perséfone para que comiese seis semillas de granada que la obligarían a volver seis meses cada año.
Al volver Perséfone con su madre, la tierra florecía y se impregnaba de vegetación, pero cuando volvía a los infiernos durante los seis meses restantes del año, la tierra comenzaba a debilitarse y marchitarse, lo que explica el proceso natural del cambio de las estaciones.
Al volver Perséfone con su madre, la tierra florecía y se impregnaba de vegetación, pero cuando volvía a los infiernos durante los seis meses restantes del año, la tierra comenzaba a debilitarse y marchitarse, lo que explica el proceso natural del cambio de las estaciones.
2 comentarios:
Precioso el mito.
Espero que esa herida ya no duela.
Un saludillo!!
Ya casi no hay herida, está todo cicatricado y sin dolor ^^
Aprovecho para dar ánimos, que ya viene la etapa final de examenes!
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